Cada año, en el marco del Trufforum, Laumont concede el prestigioso título de Embajador de Honor de la Trufa. Este reconocimiento distingue a chefs y profesionales que han contribuido de manera excepcional a la difusión y puesta en valor de la trufa en la gastronomía.
El Trufforum es un evento internacional que reúne a expertos, productores y amantes de la trufa para promover su cultura, su uso en la cocina y su valor gastronómico. Se trata de un punto de encuentro clave para la divulgación de este hongo tan apreciado, donde Laumont refuerza su compromiso con la excelencia y la sostenibilidad del sector trufero.
Desde 2019, el título de Embajador de Honor de la Trufa ha sido otorgado en el Trufforum a grandes referentes de la gastronomía: Carme Ruscalleda y Toni Balam (2019), Ferran Adrià (2020), Nandu Jubany (2021), David Andrés y, a título póstumo, Santi Santamaria (2022), Paco Pérez (2023), Joan Roca (2024), y Martín Berasategui junto a un reconocimiento póstumo a Fermí Puig (2025).

Carme Ruscalleda es una de las chefs más influyentes de la gastronomía mundial, con un total de siete estrellas Michelin a lo largo de su trayectoria. Junto a su esposo, Toni Balam, ha sido la mente creativa detrás del legendario Sant Pau, donde la trufa siempre ha tenido un papel esencial en su cocina de autor.
Su capacidad para reinterpretar los sabores tradicionales con productos de temporada, incluyendo la trufa, ha marcado un antes y un después en la alta cocina.

Pionero de la gastronomía molecular y fundador de elBulli, Ferran Adrià revolucionó el mundo culinario con su enfoque innovador. La trufa siempre ha sido un ingrediente clave en su cocina, utilizada para explorar nuevas texturas y técnicas.
Su capacidad para transformar la percepción de los sabores ha elevado el estatus de la trufa en la gastronomía contemporánea, convirtiéndola en un símbolo de creatividad y sofisticación.

Chef con estrella Michelin y referente de la cocina catalana, Nandu Jubany ha sabido combinar la tradición con la innovación en cada uno de sus proyectos, desde Can Jubany hasta su asesoría en múltiples restaurantes de prestigio.
Su pasión por los productos de proximidad, incluida la trufa, se refleja en su cocina de sabor auténtico, donde este hongo es protagonista en platos memorables que resaltan su potencia aromática.

David Andrés es uno de los talentos jóvenes más destacados de la gastronomía, reconocido como uno de los mejores chefs del mundo menores de 30 años. Como chef de Via Veneto en Barcelona y propietario de Somiatruites en Igualada, ha sabido combinar creatividad y respeto por los ingredientes, dando a la trufa un papel fundamental en sus elaboraciones.
Por otro lado, Santi Santamaria, homenajeado a título póstumo, fue un defensor inquebrantable de la cocina tradicional de producto y fundador del icónico Can Fabes, el primer restaurante de Cataluña en recibir tres estrellas Michelin. Su amor por la trufa se reflejaba en platos refinados donde el sabor y la calidad eran la prioridad.

Con cinco estrellas Michelin, Paco Pérez es un maestro de la cocina de vanguardia con una fuerte raíz mediterránea. En sus restaurantes, como Miramar o Enoteca, la trufa es un ingrediente indispensable para crear experiencias gastronómicas únicas.
Su capacidad para jugar con los matices y la intensidad de este hongo lo ha convertido en un embajador natural de su uso en la alta cocina.

Joan Roca, chef de El Celler de Can Roca, ha sido reconocido como uno de los mejores cocineros del mundo, llevando la cocina catalana a lo más alto.
Su dominio de la técnica y su profundo respeto por los ingredientes lo han llevado a crear algunos de los platos más emblemáticos con trufa, donde este hongo se convierte en el eje central de experiencias sensoriales inolvidables.

Martín Berasategui, con más estrellas Michelin que ningún otro chef en España, ha hecho de la excelencia su sello personal. En su emblemático restaurante Martín Berasategui en Lasarte-Oria (tres estrellas Michelin) y en sus múltiples proyectos gastronómicos, ha convertido la trufa en un ingrediente esencial de su cocina.
Junto a él, se reconoció póstumamente a Fermí Puig, quien dejó un legado imborrable en la cocina catalana. Como chef de Drolma, el exclusivo restaurante del Hotel Majestic de Barcelona que dirigió hasta su cierre en 2011, y posteriormente en su propio restaurante Fermí Puig, destacó por su elegancia culinaria y su amor por la trufa, realzando su sabor con técnicas clásicas y precisas.
Carme Ruscalleda es una de las chefs más influyentes de la gastronomía mundial, con un total de siete estrellas Michelin a lo largo de su trayectoria. Junto a su esposo, Toni Balam, ha sido la mente creativa detrás del legendario Sant Pau, donde la trufa siempre ha tenido un papel esencial en su cocina de autor.
Su capacidad para reinterpretar los sabores tradicionales con productos de temporada, incluyendo la trufa, ha marcado un antes y un después en la alta cocina.
Pionero de la gastronomía molecular y fundador de elBulli, Ferran Adrià revolucionó el mundo culinario con su enfoque innovador. La trufa siempre ha sido un ingrediente clave en su cocina, utilizada para explorar nuevas texturas y técnicas.
Su capacidad para transformar la percepción de los sabores ha elevado el estatus de la trufa en la gastronomía contemporánea, convirtiéndola en un símbolo de creatividad y sofisticación.
Chef con estrella Michelin y referente de la cocina catalana, Nandu Jubany ha sabido combinar la tradición con la innovación en cada uno de sus proyectos, desde Can Jubany hasta su asesoría en múltiples restaurantes de prestigio.
Su pasión por los productos de proximidad, incluida la trufa, se refleja en su cocina de sabor auténtico, donde este hongo es protagonista en platos memorables que resaltan su potencia aromática.
David Andrés es uno de los talentos jóvenes más destacados de la gastronomía, reconocido como uno de los mejores chefs del mundo menores de 30 años. Como chef de Via Veneto en Barcelona y propietario de Somiatruites en Igualada, ha sabido combinar creatividad y respeto por los ingredientes, dando a la trufa un papel fundamental en sus elaboraciones.
Por otro lado, Santi Santamaria, homenajeado a título póstumo, fue un defensor inquebrantable de la cocina tradicional de producto y fundador del icónico Can Fabes, el primer restaurante de Cataluña en recibir tres estrellas Michelin. Su amor por la trufa se reflejaba en platos refinados donde el sabor y la calidad eran la prioridad.
Con cinco estrellas Michelin, Paco Pérez es un maestro de la cocina de vanguardia con una fuerte raíz mediterránea. En sus restaurantes, como Miramar o Enoteca, la trufa es un ingrediente indispensable para crear experiencias gastronómicas únicas.
Su capacidad para jugar con los matices y la intensidad de este hongo lo ha convertido en un embajador natural de su uso en la alta cocina.
Joan Roca, chef de El Celler de Can Roca, ha sido reconocido como uno de los mejores cocineros del mundo, llevando la cocina catalana a lo más alto.
Su dominio de la técnica y su profundo respeto por los ingredientes lo han llevado a crear algunos de los platos más emblemáticos con trufa, donde este hongo se convierte en el eje central de experiencias sensoriales inolvidables.
Martín Berasategui, con más estrellas Michelin que ningún otro chef en España, ha hecho de la excelencia su sello personal. En su emblemático restaurante Martín Berasategui en Lasarte-Oria (tres estrellas Michelin) y en sus múltiples proyectos gastronómicos, ha convertido la trufa en un ingrediente esencial de su cocina.
Junto a él, se reconoció póstumamente a Fermí Puig, quien dejó un legado imborrable en la cocina catalana. Como chef de Drolma, el exclusivo restaurante del Hotel Majestic de Barcelona que dirigió hasta su cierre en 2011, y posteriormente en su propio restaurante Fermí Puig, destacó por su elegancia culinaria y su amor por la trufa, realzando su sabor con técnicas clásicas y precisas.






